Con las TIC: una breve historia, para padres.

Puede verse que las tecnologías de información y de comunicación TICs aplicadas en la educación, cuando no son orientadas en su uso, afectan al alumno, en su ámbito social y de relaciones, invadiendo sus espacios, y forzándolo a un nuevo tipo de aislamiento casi sin formalidad, con menos contacto físico y visual hacia otros humanos, mientras simultáneamente ellas pretenden acercarlo más a su entorno vital y futuro laboral.

Como ejemplo, hoy ya todos entendemos que el estar "conectado" puede significar realmente estar "solo" con más frecuencia, con el riesgo también frecuente de no lograr saber realmente con quién o con quienes se interactúa del otro lado de la línea en ese momento.

Por otra parte, el desarrollo tecnológico representa un cambio sobre cómo se ven las cosas en su relación con el tiempo, las personas y los contenidos, ya que no solo la interacción se da para el mismo tema en cualquier momento temporal presente o futuro, sino que se desarrollan extremos -como por ejemplo, el inducir conductas extrañas según convenga al momento e interés-. Todo acompañado deotro tipo de lectura no lineal,  lo que requiere del uso de nuevas capacidades de entendimiento y raciocinio que antes no existían o al menos, no se necesitaban.

Para decirlo de alguna manera, el hipertexto y la multimedia están cambiando continuamente la forma de comunicar y de construir conceptos, y la tecnología trabaja para ello, diríamos que por demanda, generando así el nuevo paradigma de este siglo.

En el apoyo a la educación de los hijos, en virtud de utilizar la aplicación tecnológica del momento, el proceso de formación y aprendizaje se hace ahora dándosele una lectura situacional propia e individual ante ese  universo que se despliega abruptamente frente a sí, casi sin control, por lo que el sujeto que aprende tenderá desde el inicio mismo del proceso,  a bordear peligrosamente el abismo de lo desconocido con la  esperanza de, en un par de saltos, abarcar lo necesario y útil, pero siempre observando que existe por doquier la posibilidad de hallar "un poco más", para definir, entender o conocer sobre aquello que motivó el acercamiento y lo que se le relaciona.


De manera intempestiva y simultánea, quien pretende acompañar fuera del colegio al estudiante, para ese momento ya habrá encontrado que tal vez no alcance, dada la vertiginosa velocidad con que aquella avanza, a lograr la sosegada paz del conocimiento que brinda la otra orilla.

Tanta información, tanto dato disponible, le obliga -quizá por pertenecer a esa vieja generación de los no nativos digitales- a dar brincos en un pié lanzando palos de ciego con cierta frecuencia, en aras de organizar y hasta replantear todo el conocimiento en ese breve lapso que dan los hijos; simplemente para construir algo que se supone les servirá no sólo para el momento.

Bastante pronto se declarará casi vencido ante la magnitud de la tarea, notando que sin un norte aparente, tampoco hay un puerto al que llegar.  Cómo se debe... [hacer]? Por dónde... [empezar]? Servirá... [ese dato]? Y..[Aquella información]? Quién  verifica [qué]? Etc, etc, etc.

Se vé necesitado de apoyo y orientación, al menos para dar una indicación adecuada sobre lo que ahora observa en su hijo navegante, pues puede mirar casi con terror cómo éste tranquilamente acepta lo que encuentra, dándolo por cierto; concluye entonces que a pesar de que el chico parece dominar la tecnologia, no es allí donde debe buscar.

Se consuela pensando que más bien es detrás del escenario, en la tramoya, donde se debe buscar esa vieja imagen tranquilizadora del que sabe que enseña, de aquel que mueve hilos sin que apenas se note; tal vez acompañado de una comprensiva sonrisa encontrará de él respuestas prácticas.

Sin embargo, a éste nuevo actor también le ve aparentemente confundido por la práctica, la crítica y la presión que hoy le hace la demanda.  Quizá sea por sus problemas diarios, o a lo mejor por intentar preparar adecuadamente una clase que presiente pueda ser en cualquier momento más agresiva que la anterior, pero hoy ya no existe tan anhelada sonrisa.

Para su grupo de alumnos con desigual nivel de acceso tecnológico, presiente que lo que ahora piensa tal vez no importe mucho; no vé esa ruta práctica diferente a la que él mismo recorrió; y nadie parece darse cuenta de sus nuevas necesidades de tiempo, de manejo de la tecnologia, de sobrevivencia y reconocimiento. Tal vez ya está concluyendo que no vale la pena el sobre-esfuerzo, y que la autoinstrucción tiene sus propios límites que alcanzará en algún momento, lo que le brinda un respiro.  A lo mejor esperará como otros para ver los efectos de un nuevo paradigma sobre lo que por ahora sí sabe hacer.

Finalmente ese padre, ya desconcertado, vé cómo sólo le queda la comunidad global, con recursos diversos, no todos orientados en el mismo sentido. Aunque global y multidiversa, en ella es posible que pueda ver una luz, que es todo lo que necesita. Es su esperanza.

Ya sabe que hay que aprender a "leer" en hipertexto, pues allí a la vez se entiende y se construye.  Ya empieza a vislumbrar cómo la tecnología aplicada está casada con el desarrollo, con relaciones y en dimensiones más allá de lo medible; también entiende que cambiar la sociedad actual por una tecnológicamente más competente, trae un costo humano que aún no se reconoce pero que empieza a sentirse; conoce de al menos tres dimensiones por desarrollar -la escuela, la infraestructura y la pedagogia- pero presiente que hay que preparar las estructuras desde su base, lo que implica redimensionar y favorecer un nuevo estilo de trabajo y de aprendizaje-enseñanza; sabe que la tarea es multidisciplinar, y escucha que hay muchos trabajando en ello. Y también que hay otros preocupados por los alcances de la improvisación, cuando se dá por falta de una adecuada interacción, en medio de una abrumadora renovación tecnológica.

Y sí: está de acuerdo con que la tecnología aplicada a la educación trae múltiples beneficios. Pero mientras se da el cambio y se vence esa "brecha digital", deberá como padre o acudiente, responder por lo que aparentemente no está claro para todos: con el mundo a un click de distancia, cómo evitar los actuales vacíos y los errores de conocimiento en el menor que aprende? Es decir, como guiarle adecuada y complementariamente en esa nueva forma de adquisición de información llevándolo por terrenos más seguros y productivos? Cómo involucrarse dentro del contexto escolar, si ya no basta con mantener actitudes y normas de control, sino que toca volverse más participativo?

Y se da cuenta que sólo tendrá por ahora, como herramientas, la creatividad, su capacidad de trabajo, su dedicación y raciocinio, la flexibilidad para aprender de nuevo, y su propia experiencia e intuición, todo mezclado con esa gran dosis de amor y esperanza por sus hijos, que finalmente son las que le guían.

OttoJ.

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Créditos de imagenes:
(1) Tomado del sitio "Freepick" (que a su vez lo refiere como originario de http://www.vectoropenstock.com/)   en http://www.freepik.es/vector-gratis/diseno-abstracto-del-vector-del-fondo_547060.htm

(2) Tomado de "Un tunel que va rumbo a la ciencia" (oct-2011), del periódico Portafolio.co en http://www.portafolio.co/portafolio-plus/un-tunel-que-va-rumbo-la-ciencia

(3) Tomado de "Incorporación de las TICs en la Educación Preescolar" (2010) del blog "Profe: Fernanda Zamorano" en http://fermatt.wordpress.com/2010/09/29/incorporacion-de-las-tics-en-la-educacion-preescolar/